


















Nunca me he considerado una tia buena, como suelen decir. Siempre he intentado parecer sexy pues como a todas las mujeres me agrada gustar a los hombres. No tengo un fisico espectacular pero no estoy mal segun dicen, si tengo algo, son tetas. Son grandes y cuando llegue al instituto aprendi a lucirlas con escotes y camisetas ajustadas, sin duda notaba como las miraban, companeros de clase, profesores e incluso mi hermano, a veces con descaro y me consta que se masturbaba conmigo algo que me subia el autoestima, porque no admitirlo.
Mi novio era el unico que tenia acceso a ellas, comiendome los pezones y regalandome momentos de placer.
Me hice unas fotos sexys para el, sobre la cama con un vestido negro muy sensual, al verlas quiso follarme esa misma noche en su coche, a lo que yo al fin accedi.
Pero no es esa noche de la que quiero hablar, sino de lo que sucedio semanas despues.
En aquella epoca vivia con mis padres y mis hermanos, era una noche de verano y estaba tumbada en la cama intentando dormir pues el calor sofocante me lo impedia.
Para ayudarme a conciliar el suelo decidi masturbarme, algo que siempre hacia y me funcionaba.
Me quite el camison y me quede en bragas para comenzar a fantasear con mi novio o con algun famoso que me gustara para proceder a acariciar mi cono por encima de la fina tela. Note como mi corazon se aceleraba y mi sexo se humedecia.
Era el momento oportuno para quitarme las bragas, asi que me quede desnuda y acaricie y pellizque mis pezones para aumentar mi excitacion intentando no gemir mucho y que mi familia me oyera.
Entonces la puerta de mi cuarto se abrio. Yo me detuve y rapidamente me tape con la sabana e intente aparentar dormir.
-¿Quien entra sin llamar? -pense -!saben que tenemos la regla de llamar siempre!
Note como aquel visitante entraba y se sentaba a mi lado en el colchon. No sabia que pensar pues nunca me habia ocurrido algo parecido y espere que aquella persona misteriosa dijera algo, pero no hablo.
Un escalofrio recorrio mi cuerpo cuando poso una mano sobre mi pierna que fue ascenciendo hasta llegar a mi cono, que cubierto por la sabana aun necesitaba una buena polla. Una vez alli comenzo a acariciarlo delicadamente con ternura y erotismo.
Paralizada por la situacion, mi cuerpo ya caliente de por si, reacciono a aquel estimulo por lo que mi respiracion se acelero y no pude evitar emitir un gemido que me reproche mentalmente.
Entonces el visitante se levanto para desnudarse rapidamente y agarro la sabana la cual aparto para descubrir mi cuerpo desnudo.
Yo abri los ojos y me incorpore para descubrir entre la tenue oscuridad a mi hermano, desnudo con su polla tiesa.
-¿Que vas a hacer? -pregunte aunque era evidente.
Sin responder se tumbo encima mio aplastandome con su cuerpo, note su calor y su pene endurecido y en aquel momento supe que me iba a follar hiciera lo que hiciera.
-!Dejate! !Por favor! -me rogo.
-!No! -respondi sin mucha oposicion -!Eres mi hermano!
Hundio su cara en mi cuello para besarlo y morderlo mientras me decia lo buena que estaba lo que me provoco todavia mas placer.
Entre gemidos y jadeos amenace con gritar para despertar a nuestros padres si continuaba con aquel depravado acto.
-Pues no me queda otra -respondio tapandome la boca -necesito follarte.
Abrio mis piernas con las suyas y se coloco dispuesto a penetrarme, agarro su miembro con la mano que tenia libre y colocandola a la entrada de mi mojado cono empujo.
Yo grite al sentirlo dentro de mi aunque no de me oyera. Empuje su cuerpo sin exito y cuando comenzo a moverse metiendo y sacando su miembro mis brazos lo rodearon sin remedio para entregarme a el.
Tras un rato comence a gemir y a mover mi pelvis intentando llegar al mayor placer posible y su mano libero mi boca con la seguridad de que ya estaba totalmente entregada.
No sabia si mi hermano me habia forzado o no, si aquello era un abuso sexual por su parte o no, el caso es que me estaba proporcionando un polvo que nunca olvidare.
Agarro mis tetas y las apreto con fuerza, acercando su boca a mis pezones para comerselos como un animal mientras sus manos apretaban mi culo casi con rabia dejandome sus dedos marcados en pequenos morados.
Aquel trato por su parte, como si yo fuera una cualquiera me ponia a cien, descubriendo en mi una faceta desconocida.
Su boca se acerco a la mia y nos besamos apasionadamente juntando nuestras lenguas hasta que senti como mi cuerpo temblaba en un gran orgasmo.
El tuvo que notarlo pues acelero la follada y gimio silenciado por mi boca para correrse violentamente en mi interior.
Al sentir todo aquello comprobe que me tenia muchas ganas.
Me dio un suave beso, como agradeciendome haber sido suya aquella noche, se levanto y sin mediar palabra se puso el pijama y salio.
Me quede sobre la cama, sudorosa y agradecida pero confusa por lo sucedido. Me costo quedarme dormida pero al final fui presa del sueno como la habia sido de mi hermano.
Al dia siguiente el se comporto como si nada hubiera pasado.
-¿Acaso a sido un sueno? -me dije. Pero sabia que habia ocurrido de verdad y aunque me case con mi novio siempre recordare aquella noche como una de las mejores de mi vida.







